Descripción del término jurídico Ordenamiento jurídico:
El ordenamiento jurídico es el sistema de normas, principios y reglas jurídicas que rigen en un espacio y tiempo determinados, organizando la sociedad y las relaciones entre los poderes públicos y los ciudadanos. Este conjunto normativo está estructurado y jerarquizado bajo principios fundamentales que garantizan su coherencia y eficacia. Dentro del ordenamiento jurídico español, la Constitución de 1978 ostenta la supremacía normativa y es el pilar sobre el cual descansan el resto de las normativas vigentes.
Las fuentes del ordenamiento jurídico español se estructuran en diversas categorías: la ley orgánica que requiere una mayoría absoluta del Congreso para su aprobación y se refiere a materias específicas determinadas por la Constitución; la ley ordinaria que se adopta por mayoría simple y regula aspectos menos fundamentales; los reglamentos que son normas con rango inferior a la ley y los tratados internacionales que, una vez ratificados, forman parte del orden interno según lo establecido.
Un aspecto clave del ordenamiento jurídico es la jerarquía normativa donde, en caso de conflicto entre normas, prevalece la que ostenta mayor rango. Asimismo, la interpretación y aplicación de las normas corresponde a los tribunales de justicia, siendo el Tribunal Constitucional el máximo garante de la constitucionalidad de las leyes.
Por tanto, el ordenamiento jurídico no es un cúmulo desordenado de leyes, sino un sistema estructurado que busca la justicia, la seguridad jurídica y el bienestar social, articulándose mediante distintos niveles donde normas superiores controlan a las inferiores y donde se salvaguardan los derechos y libertades fundamentales de los ciudadanos.
Contexto jurídico en el que puede utilizarse el término Ordenamiento jurídico:
Un ejemplo concreto de la aplicación del ordenamiento jurídico podría encontrarse en el campo de las normas administrativas. Supongamos que se promulga un Real Decreto que establece normas para la gestión de residuos en las ciudades. Un ayuntamiento, de acuerdo con este Real Decreto, aprueba una ordenanza municipal que regula detalladamente las condiciones y horarios para la recogida de basura. En este caso, el Real Decreto tendría un rango superior y la ordenanza municipal debería respetar y conformarse a los límites que aquel establece. Si existiera algún conflicto entre ambos, la norma de rango superior prevalecería y sería aplicable ante los tribunales en caso de litigio.
Otro ejemplo sería el de una ley ordinaria que regula la contratación pública y establece criterios de adjudicación de contratos a empresas. Si una comunidad autónoma intenta promulgar una norma que contradiga estos criterios, tal norma resultaría inaplicable en cuanto fuera contraria a la ley de rango superior. En este caso, será el ordenamiento jurídico el que determinará la validez de la norma autonómica y garantizará que se respeten los principios establecidos por la ley general.
El estudio y comprensión del ordenamiento jurídico es fundamental para cualquier operador jurídico. No solo se trata de conocer el contenido específico de las leyes, sino también de entender cómo se articulan y se aplican en el vasto entramado social que las rodea. La vigencia y respeto de este ordenamiento es lo que permite que los estados de derecho funcionen adecuadamente, proporcionando a los ciudadanos un entorno regido por la legalidad, la seguridad y la equidad.