Descripción del término jurídico Tasación:
La tasación en el ámbito jurídico español es un procedimiento mediante el cual se establece de manera oficial el valor monetario de un bien, derecho o servicio. Esta valoración puede ser requerida en diversos contextos legales, como en ejecuciones hipotecarias, divisiones patrimoniales, procedimientos de expropiación forzosa, determinación de indemnizaciones o en procesos de liquidación de sociedades. La tasación se realiza normalmente por expertos en la materia del bien a tasar, que pueden ser peritos tasadores, sociedades de tasación o incluso organismos oficiales.
El proceso de tasación requiere un estudio detallado del objeto de la tasación, teniendo en cuenta todas las características que puedan influir en su valor, como la ubicación, el estado de conservación, las circunstancias de mercado y otros factores pertinentes. La tasación se consigna en un informe que tiene que contener una descripción detallada del bien, el método o métodos de valoración utilizados y la justificación del valor asignado.
Es importante que la tasación sea realizada de forma imparcial y con independencia, ya que su resultado tiene efectos legales y económicos significativos. En el caso de que la parte interesada no esté conforme con la tasación realizada, puede solicitar una segunda valoración o impugnar judicialmente la misma.
La ley española establece determinadas normas y procedimientos que deben seguirse para que una tasación sea reconocida oficialmente. De acuerdo con la normativa, una tasación válida debe ser realizada por profesionales debidamente cualificados y registrados, empleando métodos reconocidos y aceptados en el ámbito profesional y científico correspondiente.
Contexto jurídico en el que puede utilizarse el término Tasación:
Uno de los contextos legales comunes donde se aplica la tasación es durante el proceso de una ejecución hipotecaria. Si no se llega a un acuerdo entre la entidad financiera y el deudor hipotecario para la cancelación de la deuda, se procede a la ejecución de la garantía, que generalmente es un inmueble. Para la venta en subasta pública de este inmueble, es necesario establecer su precio de salida. Aquí entra en juego la tasación, que determinará este valor. La subasta no comenzará por un precio inferior al 75% del valor de tasación del bien, garantizando así que la entidad financiera pueda recuperar la mayor cantidad posible del préstamo impagado.
Otro ejemplo del uso de la tasación ocurre en el ámbito de las herencias. Al fallecer una persona, sus herederos deben liquidar el Impuesto de Sucesiones y Donaciones, que se calcula sobre el valor de los bienes heredados. Para determinar este valor, se realiza una tasación de todos los bienes del caudal hereditario, como inmuebles, vehículos y otros activos. Esta valoración marcará la base imponible sobre la que los herederos deberán pagar el impuesto correspondiente. Además, en caso de que exista más de un heredero y estos decidan repartirse los bienes de forma equitativa, la tasación proporcionará una referencia para poder efectuar la división proporcional de los mismos.
La correcta realización de una tasación es esencial debido a sus implicaciones en la justicia tributaria y en la equidad de los procesos judiciales y administrativos en España. La fiabilidad de esta práctica legal promueve la transparencia en las transacciones, protege los derechos de propiedad y sirve de base para la toma de decisiones informadas tanto por particulares como por autoridades.
